A finales de enero, Elon Musk publicó en X el éxito de la primera intervención quirúrgica implantando un dispositivo desarrollado por su start up Neurolink en un humano. El nombre del dispositivo es Telepathy.

La comunidad científica está atenta a lo conseguido por el equipo de Elon Musk que en septiembre de 2023 el organismo competente, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE.UU. (FDA).

Con el visto bueno de la FDA, Neurolink implantó Telepathy a una persona elegida entre un grupo de voluntarios, afectados de tetraplejia y esclerosis lateral amiotrófica. El implante ha sido un éxito, pero para conocer los resultados se debe seguir los pasos de un estudio que promete ser largo.

Avance tecnológico de Telepathy

El equipo de Elon Musk es revolucionario desde el punto de vista tecnológico, Telepathy lleva una batería que se recarga externamente y dispone de 1.024 electrodos, distribuidos en 64 hilos, que transmiten la actividad cerebral de forma inalámbrica.

El dispositivo fue aprobado por la FDA, este avala que está hecho con rigor, se espera que Telepathy consiga medir las señales cerebrales, relacionadas con el movimiento de personas de movilidad reducida.

Que pueda servir para gobernar el movimiento de una prótesis o interactuar con un ordenador, una señal muscular no equivale con un pensamiento, es lo que se conoce como interfaz cerebro-máquina.

Lo revolucionario sería que el dispositivo de Neuralin funcione reconociendo la actividad neuronal que genera el pensamiento, y es posible que esto no se logre nunca.

Zona ciega

Cada vez es un reto tratar de medir señales del cerebro, la oscuridad en la que se encuentra el observador después de que una neurona se activa, esto no ocurre con todas las células, como la célula muscular del corazón.

Para medir la actividad eléctrica de una neurona y la actividad eléctrica de un miocito se utiliza la misma tecnología, pero cuando este último dispara el observador se contrae, puede relacionar la señal eléctrica con la contracción de la célula muscular.

Por ejemplo, la contracción de todos los miocitos del corazón produce, que la sangre circule por el cuerpo, esto no ocurre cuando se observa el disparo de una neurona, no se observa un cambio significativo, el pensamiento generado no es visible, el disparo de la neurona se pierde en la oscuridad.

Estímulos cerebrales profundos

Existen dispositivos que se implantan dentro del cerebro o cerca del mismo e interaccionan con él, los implantes cocleares, los utilizan las personas que carecen de las células que se encargan de transformar las señales acústicas que llegan del exterior a las señales eléctricas que reconocemos como sonidos.

El implante recurre a pequeños micrófonos ubicados en la oreja, envía los sólidos recogidos a electrodos que se diseminan a lo largo de la cóclea, se observa cuando se actúa cerca del cerebro, se llega al nervio auditivo.

Otro dispositivo que actúa esta vez dentro del cerebro y está debidamente aprobado es el estimulador cerebral profundo, comenzó a utilizarse para tratar el Parkinson y luego se extendió a otras patologías, como la obesidad mórbida o la depresión.

Por admin